Protectores de Pezones Medela

Características

•  Una ligera presión puede ayudar a dar forma a los pezones invertidos o planos, preparándolos así para la lactancia
•  Una membrana flexible y suave sobre tu piel
•  Ajuste al pecho preciso y cómodo
•  Su diseño discreto hace que no se noten debajo de la ropa
•  Un único tamaño para todas las madres
•  Sin BPA (bisfenol A)

Dar el pecho con pezones invertidos o planos

Si tienes los pezones invertidos o planos, la lactancia puede ser algo más difícil, pero, desde luego, no imposible. Algunos bebés tienen problemas para agarrarse a los pezones planos, lo cual provoca dolor en los pezones. Además, es posible que un pezón invertido o plano no llegue al paladar del bebé, lo que puede imposibilitar la activación del reflejo de succión. No obstante, recuerda que muchas mujeres con estos tipos de pezones no tienen ningún problema a la hora de dar el pecho. De hecho, es posible que notes que, a medida que tus pechos van cambiando durante el embarazo, tus pezones empiezan a sobresalir más. Pero si este no es tu caso, puede que quieras usar los formadores de pezones.

¿Cómo funcionan los formadores de pezones de Medela?

Los formadores de pezones aplican una ligera presión sobre la areola (el círculo de piel de color más oscuro que rodea el pezón), lo que puede ayudar a sacar un pezón plano o invertido hacia fuera.

¿Cuándo puedo empezar a utilizar los formadores de pezones?

Puedes empezar a utilizar los formadores de pezones durante el embarazo, a partir de las 32 semanas. No obstante, si tienes un problema médico conocido como cuello uterino incompetente (debilitado) o te han dicho que cabe la posibilidad de que tu bebé sea prematuro, habla con tu profesional sanitario antes de utilizar los formadores de pezones, ya que la estimulación de los pezones puede provocar contracciones. Empieza utilizando los formadores de pezones una hora al día y ve aumentando la duración hasta alcanzar, aproximadamente, ocho horas al día. Si fuera necesario, puedes seguir utilizándolos tras el parto, entre tomas (durante un periodo de entre 30 minutos y una hora antes de la siguiente toma). No obstante, evita su uso por la noche para evitar el desarrollo de sensibilidad en los pezones.

Formadores de pezones de Medela: modo de empleo

Los formadores de pezones de Medela están compuestos por dos piezas: una membrana de silicona flexible y suave, delicada con la piel, y una copa exterior con orificios en la parte superior que permite la circulación del aire, evitando así la humedad. La forma de la copa exterior se ha optimizado para lograr un ajuste preciso y cómodo, y cuenta con un perfil discreto para que no se note a través de la ropa. Para su uso, sigue estos sencillos pasos:

1. Coloca la membrana de silicona sobre la copa y asegúrate de que queda bien fijada a su alrededor.
2. Tras el montaje, coloca el formador de pezones en el interior del sujetador, con la abertura de la membrana centrada sobre el pezón. Los orificios de ventilación deben quedar orientados hacia arriba.

Mientras utilizas los formadores de pezones, es posible que la copa recoja algo de leche materna. No alimentes a tu bebé con esta leche. Deséchala cuando limpies las copas (véase más abajo).

Cómo limpiar los formadores de pezones

Al igual que sucede con el resto de accesorios de lactancia, debes mantener limpios los formadores de pezones. Debes desinfectarlos antes de utilizarlos por primera vez y una vez al día con posterioridad. Esta es una tarea rápida y sencilla:

• Separa las piezas y colócalas en un cazo pequeño con agua fría, preferiblemente, agua destilada. Si usas agua del grifo, puedes añadir una cucharadita de ácido cítrico para evitar que se formen depósitos de cal.
• Hierve el agua durante aproximadamente cinco minutos.
• Retira el agua con cuidado y coloca las piezas de los formadores de pezones sobre un paño limpio para que se sequen.
• También puedes utilizar una bolsa para desinfección en microondas.

Asimismo, es importante limpiar los formadores de pezones después de cada uso, separando las piezas y lavándolas con un detergente suave. A continuación, enjuágalas bien con agua fría y déjalas secar sobre un paño limpio.